sábado, 16 de julio de 2016

Puertas

Hablaban en los umbrales de las puertas
como una manera de defenderse del espacio del otro,
de no entrar a la zona de confort ajena,
de no salir de la propia.
No ponerse en evidencia.

Tal vez era una metáfora no planeada
acerca de respetar los espacios,
acerca de no invadirse,
de seguir siendo individuales.

Pero también,
no cruzar la puerta
era no salir de la soledad.

En todo eso pensaban
y nada de eso decían
cuando se jubiló el último fabricante de puertas
y murió de hambre el último cerrajero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario